Obra invitada: Rosa Iribarren

Rosa Iribarren es la primera mujer que alcanzó cierta relevancia en la pintura navarra del siglo XX. Nació en la capital ribera en 1894. La primera noticia que aparece es de 1905, aludiendo a los exámenes de niñas en Tudela donde demostró “su extensión y gran facilidad de palabra en su discurso”.

Poco después se trasladó a Pamplona, a estudiar en régimen de internado en el Colegio de las Madres Dominicas. Aquí comenzó su gusto por la pintura, a través de paisajes y cuadros de flores, afición que le venía de un tío suyo, Inocencio Ortiz, pintor aficionado.  A inicios de la década de los años veinte comienza a pintar en Tudela, bajo el magisterio de Pérez Torres.

En 1924 se trasladó a Madrid, a continuar sus estudios de pintura, encontrando el magisterio y la propia amistad del maestro Cecilio Plá. El año 1924 recibió una ayuda de 1000 ptas., por parte de la DFN, como beca para sus estudios, ayuda que conservaría hasta el año 1926.

Aunque nunca dejó de mantener contacto con su tierra natal estableció su residencia en Madrid, desarrollando una fructífera carrera como copista de obras del Museo del Prado, para lo que contó con la ayuda de otro artista navarro establecido en la capital, Natalio Hualde. Rosa Iribarren falleció el 10 de junio de 1958 en Madrid, habiendo estado casada con Benito Escudero Inglan; el matrimonio no tuvo descendencia.